CIVSA colabora con varios Centros Especiales de Empleo para ayudar a dar trabajo a personas con minusvalías.

Entre ellos podemos destacar

La LISMI establece que todas las empresas e instituciones que empleen a un número de 50 o más trabajadores, están obligadas a reservar el 2% de la plantilla para trabajadores con discapacidad (esto es, que dispongan de certificado del 33% de minusvalía como mínimo).

De manera excepcional se han establecido medidas alternativas para el cumplimiento de esta Ley, ofreciendo la posibilidad de que, excepcionalmente, las empresas queden exentas de esta obligación si realizan acciones sustitutorias, previstas y aprobadas por el entonces Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales.

Entre ellas se encuentra la posibilidad de que la empresa invierta una cantidad equivalente en bienes, servicios o donaciones en un centro especial de empleo (CEE).

Por el contrario, el incumplimiento es una infracción tipificada como grave, sancionado con multas, más la prohibición de contratar con la administración y la pérdida automática del derecho a obtener cualquier tipo de ayudas de los programas de empleo.